Hablan Las Mujeres

La Paz

Por Olivia Rodríguez

Sobre la paz han escrito desde tiempos inmemoriales cantidad de eruditos, profesionales, filósofos, pensadores, especialistas de diferentes movimientos sociales, representantes de religiones del mundo. Todos los Papas han trabajado sobre el término de la paz en sus encíclicas papales, celebrando sus concilios en el mundo, resaltando esto como valor principal del hombre ante la convivencia humana en la sociedad. La paz descrita desde la misma concepción, educación, valores para la formación del ser humano, pareciera cada vez más difícil de entender y dialogar por cuanto existen intereses políticos, económicos, raciales, sociales que se interponen para lograr una autentica  convivencia; media también la naturaleza humana del hombre por su ideología y valores entendidos para ello.

Primero se concibe como ausencia de guerra, tranquilidad, estado de concordia y buena correspondencia entre los miembros de una familia, un grupo, un pueblo, un Estado; es decir, una sociedad entera y se dice estamos en tiempos de paz.

Por otro lado, este término se emplea en diferentes actos de nuestra vida  como: anda en paz, en la despedida; con paz sea dicho, para no ofender algún miembro de una riña o disensiones; Dar la Paz, para saludar a alguien; Déjeme en Paz, solicitando no ser molestado o fastidiado; descansar o reposar en paz, como sinónimo de morirse; estar o quedarse en paz, se usa cuando en un juego se está liquidando o saldando cuentas; ir en paz o con paz de Dios y gracias a Dios, se usa en imperativo para alguien que se vaya con enfado; la paz sea en la casa, expresión para entrar en la casa; sacar en paz, es poner a salvo  uno en caso de riesgo o peligro.

Es una palabra universal para el mejor deseo de todos.

La paz a través de la historia

Tras la celebración de diversos concilios a comienzos del siglo XI la iglesia estableció La Paz de Dios con el objeto de limitar las guerras privadas. A esta institución se acogieron clérigos, agricultores, viajeros, mercaderes, monjes, a fin de obtener seguridad sobre sus bienes en especial animales de trabajo o de labores y molinos, cuya sentencia eclesiástica era la excomunión de la iglesia, no siempre fue respetada. Luego la institución desaparece entre los siglos XII y XIV a pesar de todo, la iglesia intentó acabar con las guerras, al menos durante ciertas épocas mediante la tregua de Dios.

Para lograr la paz perpetua, se puso en forma una federación de Estados que sería la estructura más viable pero Enrique IV en Francia pensaba en una federación de quince estados europeos. Durante el congreso de Utrecht (1719) Saint- Pierre presentó un proyecto de Confederación Europea con una asamblea general, proyectos similares  presentaron Rousseau, Kant y Saint Simón pero a partir del siglo XIX se abrió camino a la idea de crear un organismo de arbitraje entre Estados.

En 1847 se creó en Londres La Sociedad amigos de la Paz, en cuya iniciativa se convocaron unas series de congresos internacionales de los cuales surgió el movimiento pacifista o pacifismo y se dieron signos de representación de la paz.

Los griegos la representaron bajo los rasgos de una diosa de pie sosteniendo a su hijo Plutón. Los romanos dedicaron un altar a la Paz Romana y aparece así mismo en el reverso de numerosas monedas la figura de una mujer que sostiene una rama de palma de olivo, en representación de la paz. Los artistas occidentales adaptaron también estos modelos cuyas obras de arte representan la paz y posan en diferentes galerías y muros de Europa, otros artistas presentaban obras de teatro simulando guerras y al final el logro de la paz. Otro símbolo muy frecuente es la paloma bajo cuyo aspecto ha sido representada  por Picasso en numerosos  grabados, y es la que conocemos ahora bajo este símbolo.

¡Que la paz este con todos nosotros y en nuestros corazones!

 

Hagamos las paces

ESPERANZA CON CABLE A TIERRA

                   

Por Luisa Pernalete

Cuando leo algunas declaraciones de funcionarios diciendo cosas tales como la inflación está controlada, o que hay países que están peor y nosotros no estamos tan mal, o los ofrecimientos de diálogo, pero extienden manos  llenas de alambres de púas, uno se pregunta en cuál país viven, o si se trata de una burla.

Hay que tener “cable a tierra”: Hay venezolanos pasando hambre. Los chamos de los equipos de fútbol de un colegio de Fe y Alegría de Petare  no están entrenando, “Dicen que tienen hambre, que no tienen fuerza para correr”, me comentó la Hermana Silvia.  La está pasando mal también Josué, de San Félix, buen estudiante, deportista.  Su entrenador  le preguntó porqué estaba bajando tanto de peso, además”- agregó- no estás rindiendo”. “No estoy comendo bien”, por decirlo de manera decente. Los trabajadores de una empresa de Ciudad Bolívar están almorzando con puro mango, me comentó una conocida que trabaja ahí.  La verdad es que no puede uno creer que aquí hay alimentos para tres países. Cumaná está en el fondo del escenario. Cable a tierra.

No se me quita de la mente la niña de 4 años, edad para jugar, muerta por una bala. Tampoco me olvido de Xiomara, de Maracaibo, su hijo convulsiona, le quedan  anticonvulsivos para dos semanas. Ruega a Dios que alguien de afuera le traiga algunas cajitas.  Pableisa, periodista, pide por las redes sociales Carbamazepina, para un familiar. ¡Debe ser terrible ver a un ser querido convulsionando! Cable a tierra “Los pacientes se mueren no por la enfermedad sino por la falta de medicamentos”, me dice un médico. UrgeAyudaEnSalud, retuiteo a cada rato.

¿En dónde está la esperanza entonces? Preguntará algún lector.

Estoy en medio de un encuentro de adolescentes de escuelas de Fe y Alegría – Zona Miranda: Los Teques, Petare, Valles del Tuy. Camisas azules y beige, “Jóvenes con Corazón”.  Son más de 100. Pintan el país tal como lo ven: “la gente se pelea por comida, no hay agua, no hay luz” y así siguen… pero hay otra mirada también. “Sabemos que tenemos que esforzarnos por crear el país que queremos”, dice un equipo muy convencido. Nadie dice “Aquí estamos esperando que nos den”. No, hablan de esforzarse, de trabajar duro. “A pesar de las dificultades no perdemos la fe ni la alegría”. “Hay que animarles a ellos sin mentirles”, dice la profesora Doris. Por ellos y gracias a ellos continuamos muchos docentes. Hubo paro parcial de transporte pero las maestras fueron a trabajar. Me cuenta una directora. Resolvieron mil problemas. Eso  me anima. En otros  lares, la señora, Tere le dará trabajo en vacaciones a Josué, “Así ayudo y me pago mis cosas”, dice con responsabilidad a sus 16 años. No cede a la tentación de enredarse con los “malas juntas” de su sector.  Xiomara me dice que alguien que estaba fuera le ha traído 4 cajitas de medicinas para su hijo. Respira por un par de meses. Encontró solidaridad. Me invitan a un Sancocho Solidario para recolectar medicamentos. Hay periodistas que siguen informando. Les admiro y me anima también. ¡Todos superhéroes!

Voy haciendo mi tapiz con retazos de aquí y de allá. Creo que el país se merece menos heroísmo, se podrían ahorrar muchos sacrificios si el alto gobierno escuchara y le importara el pueblo, pero mientras miramos cerca y más allá, debo decir que hoy los adolescentes me han llenado de energía. Por ellos seguimos.

Ser Madre

Por Liliana Cadena

 Se es madre desde que se está embarazada y es que nuestro cuerpo comienza cambiar para formar a un nuevo ser. Durante mi embarazo sufrí de constantes nauseas durante los 4 primeros meses al punto de que en lugar de engordar adelgacé. Recuerdo una amiga que me dijo: “Mi niña, así usted no quiera debe de comer porque el bebé necesita alimentarse”. Aunque la frase fue dura para mí, sentí que escondía una verdad irrefutable: ante un hijo, la madre pasa a segundo plano.
 

¿Estás preparada para ser mamá?

Algunas mujeres dicen que no son madres porque aún no se sienten preparadas para ello. Es verdad sobre todo si aún no estamos muy maduras, estamos estudiando y no tenemos ni un proyecto de vida definido.

Hay mujeres que por el contrario, dicen estar  preparadas para ser madre, pero con la llegada del bebé se dan cuenta de lo equivocadas que estabas al afirmarlo. Sin embargo, es allí donde opera la magia del amor, el instinto maternal y las ganas de cuidar a ese nuevo ser y la mujer toma las riendas de la situación y asume el control. 

Ser madre: un reto constante

Los hijos crecen al igual que sus problemas; pero sin duda ser madre es un privilegio otorgado solo a seres excepcionales: Las Mujeres.

En mi caso, he disfrutado mi maternidad porque es lo que siempre había deseado, además he tenido el sólido apoyo de un compañero de vida, mi esposo, quien muy asertivamente ha sabido ser papá y mamá cuando  se queda en casa con el niño mientras yo salgo a trabajar en las tardes. También he recibido el apoyo incondicional de mi mamá, quien es otra madre para mi hijo.

Déjenme decirles que si bien es cierto las mamás sacamos la fuerza desde lo más profundo para seguir adelante aún en las condiciones más adversas, somos de carne y hueso: nos cansamos, nos deprimimos, necesitamos cariño, apoyo, comprensión y disfrutar de los mismos derechos que los demás miembros de la familia. Por eso, pienso que la experiencia de maternidad que cada una de nosotras como mujeres podamos tener inevitablemente estará ligada con el entorno y con el apoyo que recibamos.

Así que esposos: apoyen a sus esposas; hijos e hijas  valoren a sus madres, y  jefes sean comprensivos con sus empleadas que tengan hijos.

La odisea de un sueño alcanzado

Por Dailisbett León  

Desde chicos siempre tenemos sueños y metas que deseamos cumplir cuando lleguemos a ser hombres y mujeres fuertes. En lo particular, desde que era apenas una niña de aproximadamente 6 años recuerdo que amaba leer las noticas de los periódicos en voz alta con mi papi… Sonreía cada vez que veía los noticieros por televisión y amaba escuchar esas lindas voces de grandes locutores nacionales, los cuales poco a poco me fueron formando sin saber  un gran sueño!  MI GRAN SUEÑO Ser Licenciada en Comunicación Social.

No sé exactamente cuándo comencé a sentir ese anhelo, pero lo que sí sé es que toda mi vida añoraba estar en un estudio de radio y televisión redactando y grabando noticias, impartiendo realidades que para muchos quizás eran desconocidas. Fue entonces cuando comencé a estudiar esta hermosa carrera recorriendo las memorables aulas de la Universidad Católica Santa Rosa “UCSAR”.

Hoy, veo no solo idealizado, sino realizado esta meta propuesta, este sueño que perseguí a lo largo de mi vida… No es nada fácil asumir riesgos y menos retos  que a lo largo del camino se va haciendo cada vez más complicado, casi imposible de superar sobre todo cuando se trata de tu futuro.

Recuerdo que al iniciar mi carrera de Comunicación Social vivía en el Estado Miranda con mis padres. No era nada placentero tomar el tren que parte desde Cúa (Valles del Tuy), hasta caracas cada día a las 5:20am para llegar a las 7:15am en la universidad. Lo que indicaba que mi horario de levantarme era a las 4:00am para alistarme y tomar el primer tren en la estación. ¿Y qué decir de la odisea que se vive diariamente en las estaciones que cubren la ruta Miranda-Caracas? Es impresionante y difícil de creer, vale mejor vivirlo que contarlo. Pero en fin, tuve que pasar por ese proceso durante mis primeros periodos de carrera.

Tiempo después, mis padres tuvieron que mudarse al estado Bolívar, y pues… Tenía dos opciones, 1) Abandonar mi carrera y empezar una nueva en Bolívar. 2) Continuar mis estudios y buscar un lugar donde habitar durante los 4 años que restaban. Era difícil tomar una decisión pero debía hacerlo, y es que la vida se trata precisamente de eso; de tomar decisiones y correr el riesgo de lo que has pensado pueda ser lo ideal para formar tu futuro. Fue entonces cuando decidí quedarme sola en Caracas y continuar con lo que ya antes había elegido, corriendo todos los riesgos que esa decisión implicaba.

Comenzó la búsqueda, y puf! Como caído del cielo una señora ofreció su hogar para que pudiese habitar, mientras culminaba mi carrera. Pero como no todo lo que brilla es oro... empezaron los sufrimientos y decidí mudarme. Conseguí, luego, otra residencia, un poco más cómoda porque era un apartamento con todos sus enseres. Sin embargo, a los 2 meses de estar allí, el dueño decidió vender y tuve que marcharme. Pero como dicen por ahí "Dios aprieta pero no ahorca" y siempre busca el bienestar de sus hijos. Conocí a una señora quien muy amable me cedió un espacio en su habitación, mientras se desocupaba una de las habitaciones de su residencia. Llegado el tiempo, pude trasladar mis adquisiciones personales a una habitación bastante privada y allí viví por aproximadamente casi dos años. Hasta que conseguí por la misericordia de Dios, un nuevo apartamento para habitar cómodamente. Estuve allí por más de un año y fui feliz porque conté con la compañía de mis dos hermanas menores.

Sin embargo, nada  es como uno lo planifica y pues mis padres nuevamente tomaron la decisión de mudarse, pero esta vez no era a un estado del territorio venezolano, no dependía de horas de viaje por tierra, ni de alcabalas limítrofes de un estado a otro, esta vez fue distinto. Ellos se trasladaron a otro país… Ahora cuando estaba a pocos meses de culminar mi trabajo especial de grado para optar a mi título universitario, debía tomar la decisión de acompañarlos o quedarme para darle fin a lo que había iniciado hace más de 4 años. Y pues obviamente no iba a abandonar lo que tanto esfuerzo me había costado, así que una vez más quedé completamente sola.

Fue entonces cuando con mucho esmero y sentimientos de tristeza y alegría conseguí culminar mi tesis en la universidad, entregué y quedé a la espera de la fecha de exposición. 

¡Al fin llegó el día de mi defensa de grado!, estaba nerviosa, feliz y al mismo tiempo bastante triste porque no iba a contar con la compañía de los seres que más amo en la vida. Sin embargo, entendí y aprendí que en la vida hay que asumir cada riesgo con responsabilidad y entusiasmo. Al culminar mi defensa, estaba que ya no podía con mis piernas, y esta vez no era por los tacones sino por el nerviosismo que sentimos todos en ese momento. Luego nos indican que podemos ingresar  nuevamente al recinto, y una de las más hermosas palabras que pude escuchar en años fue: "Por lo cual, se le otorga a la bachiller Dailisbett León el título de Licenciada en Comunicación Social"… ¡Que hermoso!!! Es indescriptible la emoción que sentí en ese instante. Lágrimas se deslizaban por mis mejillas al ver realizado un sueño que por tanto tiempo idealicé. 

Y gracias a todas las dificultades que tuve que pasar a lo largo de mi carrera aprendí a crecer más como persona, creo que me hice una verdadera mujer. Porque todos los seres humanos valemos por nuestros sueños y por el coraje que demostremos para superar obstáculos y conseguir el éxito. Aprendí además a valorar aún más a mis seres queridos a través de la distancia… Un Te amo, o un te quiero se debe decir cada vez que tengas la oportunidad, y el poco tiempo que puedas compartir con ellos valorarlo como el más hermoso de todos los regalos. Pero sobretodo aprendí que sin Dios nada de lo que soy hubiese sido posible sin su ayuda. Fue él quien fortaleció mis brazos cansados, y quien me  dio la sabiduría para aprender y captar en mi memoria cada enseñanza de mis profesores. A Dios y a mi familia debo este gran sueño, este logro alcanzado. Por ellos soy Licenciada en Comunicación Social… Una mujer completamente feliz por ver realizado mi sueño dorado…!

… Y llegó a mi vida la Asociación Venezolana De Mujeres… Por Nancy Rangel    

Por Nancy Rangel de Chávez

El día precioso y brillante de hoy me inspiró a contarles de qué manera llegué a la Asociación Venezolana de Mujeres (A .V.M.) Estaba recién jubilada del Ministerio de Educación, luego de una enriquecedora labor de treinta y un años como educadora de niños de primaria: diez años en Mérida –mi lar nativo- y veintiuno en Caracas.; siendo esta una experiencia que para mi vida representó momentos satisfactorios y maravillosos.
Han transcurrido más de 12 años desde que un grupo de amigas: Josefa Márquez, Omaira Mendoza, María Eugenia Monsalve, Carmen de Rodríguez y yo, fuimos invitadas por la Sra. Mariita de Wasiuk,   para conocer las instalaciones de la Institución, la cual estaba presidida por la Lic. Thamara Masroua. La casa me pareció inmensa, atentas y cordiales las damas de la directiva, impresionante y valiosa la labor que cumplían y, sin darme cuenta, en un abrir y cerrar de ojos, habíamos sido elegidas y juramentadas para la siguiente Junta Directiva que sería dirigida por la Dra. Alba de Nolivos.

Desde entonces me siento contenta, orgullosa y honrada de formar parte de esta familia, con mis hermanas asociadas. Encontré otra razón para enriquecer mis días, una vez terminada mi vida docente.  Y espero, si Diosito me lo permite, seguir poniendo mi granito de arena en pro de los niños y la mujer venezolana, sabiendo que cualquier esfuerzo es poco para todo lo que debemos y podemos hacer.

La alegría de ser abuela

Por María Eugenia Monsalve

Soy abuela y este hecho ha cambiado mi vida de una manera radical. Desde el momento en que mi hija me contó de su embarazo en mi pensamiento siempre estaba la imagen de aquel nuevo ser que vendría a nuestras vidas.

El día programado para la cesárea fue de mucha tensión y por qué negarlo de cierto temor, pero este se disipó al ver a través del vidrio del retén esa figurita gordita y colorada que con el movimiento de sus manitos  saludaba  a la vida. Mi corazón se llenó de ternura y amor y solo podía dar gracias a Dios por este regalo maravilloso  que en estos seis años  ha  sido mi  mayor alegría.

Cada mes de vida de Gabriel trae una sorpresa: ver cómo va creciendo, cómo poco a poco se relaciona con todo lo que le rodea, sus manifestaciones de cariño, sus risas, rabietas, me siento fascinada. ¡Qué emoción cuando le descubres su primer dientecito y cuánta preocupación cuando se enferma!; ni qué decir cuando empieza a gatear a tratar de pararse y los cuidados y precauciones a tomar para que no se haga daño o rompa las cosas. Sus primeros pasitos me dicen que ya pronto lo veré tratando de explorar a su alrededor y ahí si hay que se me acabó la tranquilidad, pues tenía que estar siempre alerta detrás de él.

 Gabriel empieza su período de socialización al entrar a  la casa cuna, su primer día yo lo acompañé  y de verdad fue muy traumatizante, creo que esto sucede  con   la mayoría de los niños; pero poco a poco,  se fue adaptando gracias al amor que le brindaron  sus cuidadoras, ha sido un niño feliz y ha disfrutado su etapa de preescolar, hoy día se prepara para el ingreso al primer grado.

 Durante estos seis años he disfrutado enormemente su  presencia en  mi  vida. Sus manifestaciones de amor cuando me abraza, me besa y me dice “Nana” es lo máximo.

Todos los días pido a Dios lo proteja, que sea un niño feliz y luego un hombre de bien.